Lodges en Sudamérica: Inkaterra, Tierra Chiloé y Mashpi Lodge

Gracias a esta terna de lodges en Chile, Ecuador y Perú, no hace falta dormir a la intemperie ni despedirse del agua caliente para explorar tesoros naturales. Gracias a los programas de aventura diseñados por los hoteles Inkaterra, Mashpi y Tierra, los rincones remotos de las islas de Chiloé, de los bosques nubosos del Chocó y de la reserva amazónica de Tambopata están más cerca de los que parecen.

 
Hotel Tierra Chiloé a orillas del humedal de Pullao en la península de Rilán.

Hotel Tierra Chiloé a orillas del humedal de Pullao en la península de Rilán.

 

Lujo es encontrar un cocodrilo de forma espontánea en un manglar, no desollado en los zapatos de dones y doñas que se juran de alcurnia. Lujo, también, es tener acceso a agua caliente, a electricidad y a cocinas que se acoplan a dietas especiales en rincones verdaderamente apartados. Con ese par de principios como base, distintos lodges en Sudamérica sirven como base para explorar algunos de los parajes menos explorados del mundo.

Las propuestas de hoteles como Inkaterra, Mashpi Lodge y Tierra demuestran que las expediciones naturales y la hotelería de lujo no están peleadas. Es más, se llevan bastante bien. En estas propiedades los menús dependen del abasto local, la arquitectura se integra con el paisaje y los senderos no se dejan intimidar por un poco de barro. Es cosa de cada huésped elegir si pasa más tiempo en busca de aves o en un jacuzzi bajo cielos estrellados.

Por su ubicación remota, estos hoteles con alma exploradora ofrecen programas que incluyen estancia, recorridos y alimentos. Todo, sin sacrificar comodidades. A cambio de desembolsar miles de dólares y desaprender ideas rancias de lujo, estos lodges revelan la exuberancia de la Amazonía peruana, las bahías indomables de las islas de Chiloé y la biodiversidad del bosque nuboso ecuatorial.

 
Vista exterior de Mashpi Lodge en la reserva del Chocó Andino de Ecuador.

Vista exterior de Mashpi Lodge en la reserva del Chocó Andino de Ecuador.

Cabaña en el hotel amazónico Inkaterra Hacienda Concepción.

Cabaña en el hotel amazónico Inkaterra Hacienda Concepción.

 

Inkaterra Hacienda Concepción:
Hotel en la Amazonía peruana

Cuando se trata de conservar el pulmón del mundo, más por su importancia ecológica que por su potencial agrícola, Perú tiene buena fama. Aunque el país es conocido por su cocina costera y la cultura andina, más de la mitad del territorio peruano forma parte de la selva amazónica. Eso sí, se trata de una región apenas habitada en la que son más comunes los encuentros con delfines rosados y pirañas que con aviones o cruces carreteros.

Madre de Dios es el menos poblado de los departamentos del Perú. Considerada uno de los rincones mejor conservados de la Amazonía, la región esconde un lodge donde el wifi y los caminos asfaltados son conceptos desconocidos. Media hora de navegación sobre el río Madre de Dios basta para cambiar la urbanidad de Puerto Maldonado por el lujo rústico de un hotel donde los graznidos hacen de despertador y las construcciones prefieren mallas contra mosquitos que paredes.

Hacienda Concepción, en la zona de amortiguamiento de la reserva nacional Tambopata, cuenta con un jardín medicinal, un edificio principal que funciona como comedor y 25 cabañas privadas escondidas en el verdor de la jungla. El traspatio de la propiedad basta para ver desde añujes y monos hasta caimanes y shushupes, como se conoce a la víbora de cascabel muda. La lista de excursiones incluidas con el hospedaje contempla senderismo, navegación y observación de aves, pero la estrella es un safari en el lago Sandoval. En un día con suerte, el recorrido revela la presencia de nutrias gigantes, tortugas taricaya, murciélagos diurnos y decenas de especies de aves.

 
Inkaterra Hacienda Concepción utiliza canoas motorizadas para recorrer el río Madre de Dios en la Amazonía peruana.

Inkaterra Hacienda Concepción utiliza canoas motorizadas para recorrer el río Madre de Dios en la Amazonía peruana.

El edifico y las cabañas de Hacienda Concepción están diseñados para permitir la ventilación natural.

El edifico y las cabañas de Hacienda Concepción están diseñados para permitir la ventilación natural.

 

Lodge Tierra Chiloé:
Hotel en la Isla Grande de Chiloé

Chile es el país más largo del mundo. Con más de 4,200 kilómetros de longitud, el territorio cobija desde desiertos que no conocen el agua hasta glaciares que todos los años aumentan su tamaño. La mayoría de la población y la actividad se concentra en el norte y el centro del país, donde la cordillera de Los Andes y el océano Pacífico guardan distancia. Al sur de la región de Los Lagos, donde comienza la Patagonia chilena, las montañas y el mar se enfrentan cara a cara sin dar tregua siquiera a la infraestructura carretera.

El archipiélago de Chiloé, cerca de la ciudad costera de Puerto Montt, es el último rincón accesible del sur chileno. Quizás por eso ha servido como refugio tanto para los pueblos chono y huilliche como para los realistas, como se conocía a quienes honraban la corona española por encima de la independencia chilena. Además de una mezcolanza cultural rica en mitos y leyendas, la Isla Grande de Chiloé se acompaña con acantilados rebeldes y bosques apenas explorados. Tierra Chiloé, un lodge que descansa sobre la península de Rilán, ofrece programas en los que la naturaleza y las tradiciones chilotas siempre van de la mano.

20 kilómetros separan a Tierra Chiloé de Castro. La distancia no es mucha, pero basta para cambiar el tumulto de la capital del archipiélago por la calma de la península de Rilán. A orillas del humedal de Pullao, el hotel es ideal lo mismo para observar aves que para dar una vuelta autoguiada en bicicleta o relajarse en el spa. Construido con materiales locales, el lodge cuenta con muebles de artesanos chilotes, un restaurante especializado en cocina de la isla y albercas techada y al aire libre. Las excursiones de Tierra Chiloé incluyen visitas a cascadas, naufragios en playas vírgenes y jardines de líquenes como los de la reserva Bosque Piedra. Gracias al Williche, el barco privado del hotel, el catálogo de actividades también contempla visitas a algunas de las islas más pequeñas del archipiélago.

 
Pulmay, plato tradicional chilote preparado con mariscos, carne y papas locales.

Pulmay, plato tradicional chilote preparado con mariscos, carne y papas locales.

El diseño de Tierra Chiloé se inspira en los palafitos chilotes.

El diseño de Tierra Chiloé se inspira en los palafitos chilotes.

 

Mashpi Lodge:
Hotel en la reserva del Chocó Andino

Ecuador no necesita ayuda para venderse como un destino de naturaleza rico y lleno de contrastes. Con una de las extensiones más pequeñas de Sudamérica, el territorio se las arregla para acomodar volcanes nevados, cuenca amazónica e islas capaces de volarle la cabeza a Darwin. La capital del país también llama la atención, pero suele ser por sus empedrados coloniales y no por sus derroches de verdor. Por suerte, Quito esconde algo más que iglesias bañadas en oro. Y no, no hace falta volar a las Galápagos para ver algunos de los animales más coloridos y sorprendentes del Ecuador.

Declarada reserva de la biosfera en 2018, el Chocó Andino es uno de los tesoros naturales menos conocidos del país. Cuesta trabajo pensar que solo 100 kilómetros separan al centro histórico de Quito de la exuberancia del Chocó, una región de bosques nubosos donde abundan sitios arqueológicos del pueblo yumbo y especies de fauna nunca antes vistas. Repleta de cascadas y ríos, la reserva cobija diferentes microclimas donde conviven animales como la mariposa morpho azul, el oso de anteojos, el tucán del chocó, el perezoso de tres dedos y la ranita de mashpi, una especie que debe su nombre al hotel donde fue descubierta.

Mashpi Lodge se encuentra en los límites del Distrito Metropolitano de Quito, al noroeste de la capital. Escondido en una reserva privada de 2,500 hectáreas, este hotel cuenta con spa, terrazas para avistamiento de aves y estación de investigación y monitoreo de especies. Para explorar uno de los bosques más biodiversos del mundo, Mashpi ofrece desde senderos domesticados y torres babilónicas de observación hasta teleféricos de dos kilómetros de largo y bicicletas voladoras que permiten ver los árboles desde las alturas. El catálogo de excursiones incluye actividades como recorridos nocturnos, observación de colibríes, columpio en lianas y caminatas que conducen a tres cascadas distintas. Con buena condición y algo de suerte, Mashpi es el lugar ideal para ver al sigiloso gallo de la peña.

 
Diamante frentiverde en el jardín de colibríes de Mashpi Lodge.

Diamante frentiverde en el jardín de colibríes de Mashpi Lodge.

Bici aérea de Mashpi Lodge en la reserva del Chocó Andino.

Bici aérea de Mashpi Lodge en la reserva del Chocó Andino.

 

Tips de viaje:

  • Puerto Maldonado, en Perú, sirve como puerta de entrada para visitar la reserva nacional Tambopata.

  • Puerto Montt, en Chile, sirve como puerta de entrada para visitar la isla Grande de Chiloé.

  • Quito, en Ecuador, sirve como puerta de entrada para visitar la reserva de la biosfera del Chocó Andino.

  • Los programas de Inkaterra Hacienda Concepción, Mashpi Lodge y Tierra Chiloé incluyen hospedaje, comidas, transporte y actividades. No está de más visitar las comunidades cercanas y probar la cocina tradicional.

  • Hacienda Concepción y Mashpi Lodge abren todo el año. Tierra Chiloé opera entre septiembre y mayo. Las actividades en cada hotel dependen de la temporada y es importante mencionar interés en excursiones específicas al reservar.

  • Los horarios de entrada y de salida en estos hoteles se establecen con base en los programas de actividades y disponibilidad de transporte. No está de más confirmar horarios antes de reservar vuelos.

Curiosidades:

  • En la Amazonía peruana las tierras de cultivo se conocen como chacras. Las laderas del río Madre De Dios son ideales para crecer desde carambola y piña hasta cacao y ojo de pescado, uno de los ajíes o chiles más caros del mundo.

  • Cuenta la leyenda que un barco fantasma llamado El Caleuche navega por las costas de Chiloé. A su paso, una melodía hipnótica seduce a quienes ven la embarcación hasta convertirlos en tripulantes de su viaje eterno.

  • En Ecuador y en Colombia a los colibríes se les conoce también con el nombre de quindes. El término proviene del quichua, la variante norteña del quechua.

 

PIES DE FOTO
1. Mono ardilla en el sendero Lago Sandoval, reserva nacional Tambopata.
2. Canoa motorizada de Hacienda Concepción en el río Madre de Dios.
3. Mariposas de azufre en el lago Sandoval.
4. Palafitos tradicionales en Castro, capital de la Isla Grande de Chiloé.
5. La Williche, embarcación privada de Tierra Chiloé, en el humedal de Pullao.
6. Lobos marinos de dos pelos en el puerto de Castro, en Chiloé.
7. Cascada Magnolia en la reserva de Mashpi Lodge.
8. Comedor con vistas panorámicas del Chocó Andino en Mashpi Lodge.
9. Espadarana prosoblepon o rana de cristal esmeralda en Mashpi Lodge.

 

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Publicado el 17 de agosto de 2020 por Marck Gutt | Don Viajes.
Última actualización: 16 de junio de 2023.

El contenido de esta publicación es resultado de viajes realizados con el apoyo de Inkaterra, de Mashpi Lodge, de PromPerú y de Tierra Hotels.

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